También podemos practicar el reciclaje dando una segunda vida a objetos o materiales sin cambiarles la imagen o solo un poco.
Vista frontal
Vista posterior
Partiendo de una botella de refresco, cortamos la base de la botella y casi la otra mitad de cuerpo de la misma. Las encaramos pegándolas y las decoramos con testos de lana creando círculos y formas, a gusto. Luego pegamos algunas perlitas y pintamos con pintura en spray color bronce la botella (el color va a gustos, también quedan muy bien en color dorado y plateado).
Para la parte del ramaje he aprovechado dos elementos que tenía por casa del año tropecientos y lo he colocado dentro del jarrón.
Además de económico, su realización es fácil y divertida. Me ha gustado hacerlo y me gusta como ha quedado. Es un trabajo exprés de última hora.